Finaliza primera etapa de tutorías para apoyar la lectoescritura en escolares
Directores, docentes y estudiantes valoraron los avances y aprendizajes de esta experiencia que busca reducir el rezago lector y de escritura en niños de segundo a cuarto básico impulsado por el Ministerio de Educación.
Con encuentros de evaluación junto a tutores/as y directivos de colegios, finalizó la primera etapa del programa de tutorías voluntarias, Primeras Letras, coordinado por la Facultad de Letras UC para apoyar la lectoescritura en escolares de la comuna de La Florida. La iniciativa forma parte del Plan Nacional de Tutorías del Ministerio de Educación, que busca mitigar brechas en lectura, escritura y matemáticas en estudiantes de 2° a 4° básico.
En esta primera versión participaron más de 50 estudiantes de la Facultad de Letras, quienes durante varias semanas trabajaron directamente en aulas para reforzar habilidades lectoras y de escritura de niños con rezago escolar.
El pasado lunes se realizó un encuentro de cierre con tutoras y tutores voluntarios, en el que se revisaron sus impresiones, el uso de los materiales de apoyo y los principales desafíos que enfrentaron durante sus sesiones. Durante la tarde, además, se llevó a cabo una reunión con directores y jefes de UTP de colegios municipales de La Florida para recoger su evaluación y proyecciones de esta colaboración.
Además de la académica Soledad Concha, que lidera la iniciativa, esta instancia ha contado con el apoyo de las profesoras Gloria Toledo, Silvana Arriagada y Ximena Olivar, quienes han acompañado a las y los tutores en la preparación de materiales, el seguimiento pedagógico y la gestión del proyecto. Así también, han participado activamente Yudith Chamorro, de Tutorías UC, y María de los Ángeles Jansana, de Letras en Acción.

Durante la jornada de evaluación, los directivos de las escuelas participantes destacaron el trabajo comprometido, profesional y empático de las y los voluntarias de Letras y se inscribieron para continuar en el proyecto durante el segundo semestre de 2025.
Consultada por los próximos pasos de esta iniciativa, Soledad Concha indicó que en esta siguiente etapa los principales desafíos serán consolidar la presencia del proyecto en la cultura de las escuelas, facilitar la organización y evaluar los resultados de aprendizaje de niños y niñas de segundo a cuarto básico.
Experiencia desde los colegios
El principal impacto que tuvieron las tutorías en la comunidad educativa de la escuela Los Navíos de la Florida, estuvo el abrirse a una universidad que pudiera apoyarlos en beneficio de sus estudiantes con rezagos en la lectura y escritura y acortarla, según comentó, Jimena Hernández, jefa técnica de la escuela Los Navíos.
“Nosotros necesitábamos tutores porque no tenemos profesores para poder asignar horas y que ellos pudiesen trabajar con niños que tienen un rezago en la lectura y escritura. Por lo tanto en este caso, las dos tutoras que trabajaron con un 3º básico nos permitieron que los niños pudieran aprender a leer. Ellos mismos hicieron un video de regalo para las tutoras y es muy bonito porque finalmente los protagonistas son ellos. Ellos se dieron cuenta que aprendieron a leer y cuando alguien te dice ‘tía estoy aprendiendo a leer’, el corazón se abre y uno dice gracias Señor, porque es muy hermoso cuando un niño te dice aprendí a leer”.
Asimismo destacó el trabajo realizado por las estudiantes de letras especialmente en la metodología que usaron para abordar las tutorías con los niños. “Ellas colocaban reglas en termino de convivencia dentro de la sala, sin ser ellas pedagogas. Eso me llamó mucho la atención la forma de como hicieron sus tutorías. Muy comprometidas, puntuales, muy bien”, precisó.
Consultada sobre los desafíos a los que se siguen enfrentando en el rezago de la lectoescritura, la docente enfatizó la importancia de extender este tipo de programas para poder concretar el proceso de la lectura. “Creo que 8 clases no son lo suficiente, yo diría que un programa debería durar 1 año. Ambicioso, pero es lo real. No se puede decir que los niños han adquirido competencias en la lectoescritura en 8 clases, porque es un proceso que tarda mucho más, especialmente en estudiantes que presentan ciertas dificultades y que hay que buscar otros métodos. Aquí nosotros pudimos lograr cambios en la categoría de lectura. De niños silábicos a palabra a palabra. De palabra a palabra a uniones cortas. Eso nosotros pudimos lograr, pero el proceso de lectura aún no ha terminado porque eso dura alrededor de un año.
