“Quisiera que (Heredia) ocupara un lugar en la literatura chilena similar al de Martín Rivas o Aniceto Hevia”

3 de Diciembre 2025

El escritor Ramón Díaz Eterovic, Premio Nacional de Literatura 2025, repasa su trayectoria, la vigencia del detective Heredia y la manera en que su narrativa ha retratado las transformaciones sociales de Chile durante las últimas décadas.

Autor de más de treinta obras y referente indiscutido de la novela negra en Chile, Ramón Díaz Eterovic ha construido una obra que entrelaza ética, memoria y literatura. Ha hecho de la ciudad y sus sombras un espejo de la vida nacional. Desde los 80, su personaje Heredia, uno de los más emblemáticos de la narrativa chilena contemporánea, se convirtió en un testigo lúcido de la realidad social, ética y política del país abriendo un camino a un género que hasta entonces no tenía un lugar consolidado en la narrativa chilena y que encarna la búsqueda de justicia y verdad en un país en transformación.

Hoy, en esta conversación, el escritor – quien también ha cultivado la poesía y el cuento- abre una nueva página en su vínculo con la UC, al donar en el 2023 parte de su archivo personal —libretas, apuntes, recortes y fotografías— al Centro de Estudios de Literatura Chilena (CELICH) de la Facultad de Letras, con el propósito de poner a disposición de investigadores y nuevas generaciones el testimonio de su proceso creativo.

Crédito fotográfico: Rodrigo Fernández

Acaba de recibir el Premio Nacional de Literatura, el reconocimiento más importante de las letras chilenas. ¿Qué significa para usted este galardón en este punto de su carrera?

Es un reconocimiento a mi creación literaria que, entre otras cosas, ha significado ampliar el desarrollo de la narrativa chilena de las últimas décadas hacia formas que antes no contaban con una manifestación consistente en el panorama de la narrativa chilena. Me refiero a la novela negra o policial, concebida como una expresión de análisis y reflexión de la historia social del país.

Un reconocimiento a la creación de obras ajenas al género policial, vinculadas en algunos casos a la historia y vida en Magallanes; y por un constante trabajo de difusión de la literatura chilena a través de siete u ocho antologías, algunas de carácter generacional (“Contando el cuento”, “Andar con cuento” y “Vagabundos de la nada”) y otras vinculadas al género policial (“Crímenes criollos”, “Letras rojas” y “Crímenes con M de mujer”. A esto se suma la creación de revistas literarias como “La gota pura” y “El gato sin botas” que en su momento permitieron dar a conocer el trabajo de poetas y narradores chilenos emergentes en la década de los 80’. 

Su personaje Heredia se transformó en un referente de la novela policial en Chile y un espejo de la realidad social del país desde los años 80 hasta el día de hoy. ¿Qué cree que explica la vigencia del género policial y de este detective en particular? ¿Cuál cree que es el lugar que ocupa u ocupará Heredia en la historia de la literatura de nuestro país?

El género policial se articula con elementos atractivos, como el enigma, una investigación, el logro de ciertas verdades que actúan como gestos de justicia o al menos de reparación simbólica. Por otra parte, es una narrativa que se elabora con elementos de la realidad más inmediata, reconocible por los lectores.

Heredia es un personaje que permanece en el recuerdo de los lectores porque se identifica con valores éticos y con un sentimiento quijotesco de justicia y verdad. Y continúa vigente porque muchas de las desigualdades o crímenes que él investiga siguen presentes en la sociedad chilena.

Por último, quisiera que ocupara un lugar en la literatura chilena similar al de Martín Rivas o Aniceto Hevia. Que sea popular y significativo para distintas generaciones de lectores que vean en él el rostro de una época y de una manera de actuar.

Hace un tiempo donó parte de sus archivos a nuestro Centro de Literatura. ¿Qué lo motivó a compartir este material y qué cree que puede aportar a investigadores y estudiantes en el futuro?

Me pareció interesante la invitación a formar parte del Centro de Literatura y que luego se trabajara en la organización de carpetas, apuntes o libretas que, en su mayoría, forman parte de “la otra cara de la luna” de mi trabajo creativo. Pienso que pueden ayudar al conocimiento de cómo he trabajado algunas de mis novelas y de la información que he recogido como parte del proceso creativo. También doné fotos y recortes de prensa que pueden servir para reconstruir distintos aspectos de mi trabajo de escritor o de la vida literaria que me correspondió experimentar.

Crédito fotográfico: Gentileza Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.